La vespa del pintor Xavier Pousa

Fotografía de 1957 en la que el artista gallego Xavier Pousa (vestido de oscuro) recibe una botella de vino mientras come un bocadillo. Según cuenta su hija Keila, "Mi padre se desplazaba en esta vespa, en la que puedes ver como en la parte trasera lleva amarrados el caballete y su maleta de pinturas, por toda España en busca de paisajes que retratar". En esta década en concreto, el pintor centró su producción artística en plasmar la esencia de diversos paisajes, retratos y bodegones. "Para poder entender la pintura de Xavier Pousa debemos tener en cuenta una serie de circunstancias que contribuyeron a forjar su estilo artístico. Su primer contacto con la pintura, los estudios de Bellas Artes en Madrid, la apuesta por las corrientes realistas y su implicación en el ambiente cultural gallego, marcan el camino de su obra en la que desde el comienzo apostó por la figuración con la firme intención de no perder el vínculo con la realidad, opción que se traduce en una obra humanizada y en constante dialogo con la naturaleza y con su entorno personal". Para profundizar algo más en la trayectoria de este artista, recomendamos una visita la web de la Fundación Xabier Pousa.

Mi abuelo tenía una igual